El campeón no aparece

Empate del Atlético ante el Leverkusen (1-1)
El campeón no aparece

* El Atlético regala la primera parte, encaja
un gol y Simao iguala de penalti

* Sin Agüero y con Forlán desconectado
conquista el primer punto en dos partidos

El campeón sigue sin mostrarse en la Europa League. Logró su primer punto (1-1) ante el
rival más fuerte de su grupo, el Bayer Leverkusen, al que le regalaron la primera parte
entera, en la que logró su gol. El penalti transformado por Simao anunció un
segundo tiempo más alegre, pero la pelea terminó equilibrada.



Con Sergio Agüero en el palco "mirando el partido" -como él lo dice-, el Atlético de Madrid
inició la noche europea con una lección de todo lo que no debe hacer frente a un rival bien
pertrechado, organizado en defensa y decidido en ataque. Sin transiciones hermosas, el
Bayer Leverkusen llegó como quiso durante la primera parte. Cada paso que dio por delante
de la línea divisoria terminó en disparo. Todo lo contrario que el propietario del estadio, que
sobó la pelota sin criterio, la perdió con peligro en el medio y permitió un acoso intermitente
al que De Gea tuvo que sucumbir a la salida de un córner, ya con el descanso a la vista.

El lanzamiento de esquina encontró la cabeza de Hyypia en el primer esfuerzo y una intercepción
de Filipe Luis que llevó el balón al poste. Al rebote, con un buen derechazo, Derdiyok dejó
helada el alma de los rojiblancos, que no podían permitirse una segunda
derrota en dos partidos de la competición en la que defienden título.

Quique Sánchez Flores acertó al dar descanso a un descentrado Forlán, aún así el autor del único
disparo a puerta de su equipo en una fase muy oscura. En su lugar apareció Fran Mérida. Más
incisivo, menos barroco y más afortunado. Estuvo listo al forzar el penalti de Hyypia, siempre
impetuoso a pesar de que había visto una tarjeta amarilla nada más comenzar el partido. Simao
emergió desde la nada para colocar el balón en el punto de fusilamiento y transformar
el penalti por el interior del palo derecho de Adler, el portero alemán.



El Atlético también había cambiado su eje central, con la presencia más creativa de Tiago en lugar
del cortocircuitado Raúl García. Con él y la aportación de Ujfalusi en subidas
por la banda derecha, Adler se vio en la obligación de trabajar más duro.

Se paró el Leverkusen en los minutos posteriores al empate y su portero sacó un centro envenenado
del lateral checo del Atlético y vio fallar a Reyes un cabezazo fácil, también servido por Tomas Ujfalusi,
quien doblaba sin cesar a Simao, en este segundo tiempo volcado a la derecha.

Los alemanes recuperaron el tono también con los cambios, en especial con la entrada de un
delantero, el interesante Helmer, por el goleador Derdiyok. Pero los porteros vivieron sin inquietud
el último tramo del partido. Si acaso, a De Gea se le vino encima un gran susto en un
centro de Bender, otro suplente, que Helmer no acertó a cabecear a quemarropa.

F. Llamas | Madrid 30/09/2010
elmundo.es