REPORTAJE.- La amenaza es Cissé. (la amenaza son el CACHA y el KUN, no te jode...)

REPORTAJE

La amenaza es Cissé

El Panathinaikos, adversario del Atlético en la fase
previa de la 'Champions', suele practicar un
cerrojazo descarado

Campeones de Europa tanto de clubes (el Barcelona) como de selecciones (España), los
equipos de la Liga tienen derecho a pasearse con cierto aire de superioridad en los
balbuceos de las competiciones europeas. Sorteado el Arsenal, que sí infunde respeto,
al Atlético de Madrid le tocó en la fase previa de la Champions un rival siempre un escalón
por debajo de los grandes. Más allá de ser subcampeón de Europa en 1971, cuando cayó
en la final de la vieja Copa de Europa frente al Ajax, el Panathinaikos griego promete más
de lo que realmente representa. Pese a los refuerzos del argepoco miedo.

Sobre todo, porque hay un precedente muy cercano: la pobre imagen que ofreció en los
octavos de final de la pasada edición, en la que fue eliminado por un Villarreal muy superior
tanto en El Madrigal como en el estadio Spyros Louis. Un campo que, lejos del tópico, apenas
intimida a gente con cierta experiencia internacional. Por mucho que los hinchas más radicales
exhibieran bengalas y trataran además de molestar a los jugadores amarillos apuntándoles a
los ojos con un rayo láser en las mismas narices del presidente de la UEFA, Michel Platini,
presente ese día en la primera victoria de un conjunto español en territorio griego.
El Villarreal ganó 1-2 (marcaron Ibagaza y Llorente)
y el público no se comió a nadie.



Leto, de 23 años, es un extremo izquierdo de 1,88 metros de estatura, potente y rápido,
procedente de la cantera del Lanús. Rafa Benítez, el técnico de los reds, le echó el lazo en el
verano de 2007, pero problemas con el permiso de trabajo retrasaron su debut en Anfield hasta
la pasada campaña, cuando regresó al Liverpool tras un curso cedido en el Olympiacos. Pero
la gran atracción del Panathinaikos es el francés de ascendencia marfileña Cissé, de 28 años,
por quien el club ateniense abonará ocho millones al Marsella, penúltima parada de un goleador
venido a menos tras su paso por el Auxerre, el Liverpool, el Marsella y, finalmente, cedido en
el Sunderland, en el que marcó 11 goles en 38 partidos.

Tercero en la pasada Liga helena, tras el Olympiacos de Ernesto Valverde y el Paok de Salónica,
el Panathinaikos practicó un cerrojazo descarado en Europa a pesar de estar dirigido por un técnico
de la escuela holandesa. Así había hecho fortuna en la primera fase del torneo, en la que venció
inopinadamente en casa del Inter y el Werder Bremen. Un conjunto muy determinado por el
protagonismo del viejo Karagounis, capitán y mediocentro, de 32 años, acompañado por Gilberto Silva,
internacional brasileño, de 33. Karagounis es el encargado de lanzar las faltas y también de marcar un
ritmo muy lento. Otro foco de interés es la presencia en el centro de la zaga del central vasco Sarriegi,
que ya marcó el curso pasado en San Siro y que volvió a marcar recientemente ante el
Sparta de Praga en una eliminatoria previa en la que
conjunto griego remontó un 3-1 de la ida.

El Atlético, en cualquier caso, necesitará paciencia: para desactivar un sistema defensivo muy engorroso
y para madurar los dos partidos hasta imponer su calidad. Fue lo que hizo el Villarreal a pesar de que en
la ida se puso por delante el Panathinaikos con un disparo desde fuera del área de Karagounis.

Mucho más fáciles todavía son los adversarios de los españoles en la antigua Copa de la UEFA, actual
Liga Europa. El NAC Breda, rival del Villarreal, quedó octavo en la última Liga holandesa. Juega en un
estadio, el Verlegh, con capacidad para 16.400 espectadores. Su jugador más destacado es el delantero
ghanés Matthew Amoah, de 28 años, con 11 goles en la pasada campaña. El Valencia se medirá al Stabaek,
noruego, que cayó en la tercera ronda de clasificación de la Liga de Campeones frente al Copenhague.
Cuarto de momento en la Liga de su país, el Stabaek juega en un estadio moderno en las cercanías de Oslo.
¿Algún peligro? El rodaje de estar en la mitad de su campeonato. Lo mismo que el oponente del Athletic,
el Tromsoe, octavo en su torneo doméstico. Tromsoe es una ciudad del norte de Noruega,
en una pequeña isla a 340 kilómetros del círculo polar ártico.

Los 76 equipos clasificados para esta eliminatoria previa han quedado emparejados en 38 duelos que
se disputarán los días 20 y 27 de agosto. Los ganadores, junto a los diez eliminados en la fase previa
de la Champions, disputarán la fase de grupos.

El Shakhtar, como campeón de la Copa de la UEFA, se enfrentará al
Barcelona en la Supercopa de Europa el día 28 en Mónaco.

C. ROS