29/ago/2009 - MILAN 0 - INTER 4

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LIGA ITALIANA | CONTUNDENTE 0-4
EN EL DERBI MILANÉS

El Inter, con Sneijder, despedaza al Milan

MILAN.- El Inter de Milán ganó el 'derbi' milanés al doblegar con absoluta superioridad
(0-4) al AC Milan, con lo que se sitúa como líder provisional tras la disputa de uno de
los dos partidos adelantados de la segunda jornada de la Serie A.
En otro encuentro, Bari y Bolonia empataron sin goles.



Los goles de Thiago Motta, en el minuto 29, Diego Milito (36, de penalti cometido sobre
el ex barcelonista Samuel Eto'o), Maicon (45) y Dejan Stankovic (67) sentenciaron a un
Milan que se vio siempre desbordado en el derbi milanés y que jugó desde el minuto
40 en inferioridad numérica por la expulsión de Genaro Gattuso, por doble amonestación.

El Inter había dejado casi sentenciado el partido antes de la expulsión de Gattuso, cuando
ya ganaba por 0-2. El mediocentro internacional italiano cometió el penalti sobre Eto'o, lo
que le costó la primera amonestación, aunque bien pudo haber visto la roja directa.
Otra falta pocos minutos después, sobre Sneijder, le envió a la caseta con dos tarjetas
amarillas. Una excelente jugada entre Milito y Maicon puso el 0-3 antes del descanso.



Wesley Sneijder debutó con la camiseta del Inter y lo hizo como titular. El holandés se
ocupó con éxito de la marca de Ronaldinho y completó un excelente encuentro. En el
otro bando, otro neerlandés excedente del Real Madrid, Klaas Jan Huntelaar, sustituyó
a Ronaldino a los 64 minutos, inmediatamente antes del
zapatazo monumental de Stankovic, que cerró el marcador.

A la espera de que se complete la jornada este domingo, el Inter se coloca como líder
con cuatro puntos en dos partidos. El Milan se queda con
los tres que sumó en la primera jornada.

AGENCIAS

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Paliza en San Siro

En el anticipo nocturno de la segunda jornada del Calcio,
Inter apabulló a Milan y lo goleó merecidamente



De esta manera, los nerazzurri suman 4 unidades y, esperando los partidos de
mañana, lideran la tabla de posiciones, mientras que Milan se quedó con 3 puntos
y por ahora sigue en el amplio grupo de los segundos.

Los rossoneri merecieron perder este partido por la enorme ingenuidad que
demostraron, tanto en las performances individuales cuanto y más en la gestión
táctica del partido. Inter, por su parte, jugó posiblemente el mejor partido desde
que José Mourinho se hizo cargo de la condución técnica: supo aguantar en el mejor
momento de su adversario y después lo aniquiló
apenas tuvo la oportunidad de hacerlo.

En efecto, en los primeros minutos del partido Milan pareció poderlo controlar,
mantuvo la iniciativa y, más allá de un remate muy peligroso desde la distancia de
Sneijder, había arrinconado bastante bien a su rival
y creado dos buenas ocasiones de gol.



Pero la llegada de Sneijder en Inter, que Mourinho decidió poner como titular a
pesar de no haberse entrenado nunca con los compañeros, le ofreció nuevas
variantes al equipo nerazzurro, que comenzó a jugar en la franja inmediatamente
delante del área rival, con una circulación de pelota
eficiente, elegante y nunca vista antes.

Por encima, Milan sigue sin poder resolver su problema por izquierda y fue ahí
adonde golpeó duro Inter, con un esquema que seguramente fue estudiado para
atacar adonde más les podía doler a los rossoneri: Eto'o recibió un pase de Thiago
Motta a pocos pasos del área, un poco sobre la derecha, la tocó de primera para Milito
y cortó hacia el segundo palo llevándose los centrales para la izquierda.

Gracias al espacio creado por el camerunés, Thiago Motta pudo colarse por derecha,
aprovechando el grosero error de posición de Jankulovski, y recibir solo adelante del
arquero la asistencia de Milito, para luego definir con categoría, de zurda al segundo
palo. El espacio que tuvo a disposición el brasilero para meterse al área fue algo
increíble y realmente el checo mostró toda su
dificultad para jugar como lateral defensivo.



Con ese gol Milan se vino completamente y, de hecho, el verdadero partido se acabó
ahí. En efecto, el rossonero regaló el segundo: Pirlo quiso sorprender a la defensa
de Inter con un centro rápido en jugada de tiro libre, pero la defensa de Murinho
anticipó y sacó un contraataque mortal, que terminó con Gattuso cometiéndole una
falta de penal a Eto'o, quien había corrido en absoluta soledad por treinta metros
sobre la derecha. El volante dio la impresión que de sufrir por una pequeña lesión,
que le impidió anticiparlo al atacante rival sin cometer la falta de penal, que aemás
le costó la tarjeta amarilla. Milito se encargó de pegarle y de realizar el dos a cero.

Poco minutos más tarde Milan cometió, si era posible hacerlo, una ingenuidad todavía
más grande: Gattuso salió de la cancha, no aguantando más el dolor al tobillo, pero
en el banco no estaba todavía listo el cambio y el volante tuvo que volver a entrar en
la cancha. En ese minuto, tartó de anticiparse a Sneijder, entró a
destiempo y vio la segunda amarilla, algo realmente nunca visto.



Por encima, antes del final de la etapa llegó el tercero, otra vez por el lado izquierdo
de Milan: Jankulovski quiso anticipar pero Maicón lo gambeteó con una facilidad
embarazosa, tiró una pared con Milito y definió el mano a mano
con el arquero con un derechazo inapelable.

En el complemento no hubo realmente partido, con los dos equipos lentos y muy
bajos en la cancha, esperando sólo el final del encuentro. De todas maneras, Stankovic
logró darle cifras definitivas al marcador con un bombazo desde unos 25 metros
que se puso en el ángulito alto a la izquierda de Storari.



Inter demostró todo su potencial y, además, finalmente mostró una identidad de juego
clara. Será la presencia del enganche que Mourinho tanto había pedido o será que
los nerazzurri se están acostumbrando a los esquemas de su entrenador: a como
sea, Inter fue más cínico y vivo que su adversario y luego de haberse defendido
supo ganar y divertir, propinándole una verdadera paliza a su optimista rival.
Sigue siendo, sin dudas, el equipo más fuerte del Calcio.

Milan parecía poder vencer este clásico, lo que lo habría hecho volar alto en la tabla
con sueños de gloria. En cambio mostró todos sus defectos juntos: una defensa
demasiado débil por izquierda, una línea de volantes demasiado desordenada y
liviana en fase defensiva y una gestión muy optimista de Leonardo. Al final, tuvo
razón el presidente Berlusconi, quien pedía a Ronaldinho de segunda punta con
Seedorf enganche: probablemente, así el Milan
hubiera podido evitar esta vergonzosa goleada.

ESPNdeportes