El Valencia corta las alas del Atlético

El Valencia corta las alas del Atlético



Alguna vez tenía que ser. Más de siete meses después, el Atlético de Madrid
sucumbió en un partido oficial. 23 encuentros después. Una derrota que, aun
llegando con una euforia y una moral desmesurada, está dentro de la normalidad
y que no supone ningún accidente. Mestalla era la primera gran prueba de fuego
por mucho que Simeone se encargara de pregonar que ya había tenido otros
compromisos iguales de exigentes. Una derrota frente al Atlético hubiera dejado
a los 'chés' a la friolera de 17 puntos de los colchoneros. Ahora la diferencia es
de 11 aunque las sensaciones siguen siendo las mismas porque los de
Pellegrino hicieron bien poquito para llevarse los tres puntos.
Rigor defensivo y golazo de crack. Valdez puso la rúbrica.

Roberto Soldado celebró con rabia el gol que se inventó de la nada. No era para
menos. Un pase bombeado de Rami y volea extraordinaria a la media vuelta.
Imparable. El valenciano se bastó solo para provocar el pánico en la zaga rojiblanca.
Se le vio extramotivado al tener enfrente al mejor '9' del campeonato y, curiosamente,
el destino les unió en un lance desafortunado para Radamel Falcao. Vimos al 'Tigre'
sangrar. Un pisotón desafortunado del ariete del Valencia en la frente del colombiano
le provocó una aparatosa herida. Por cierto, jugada precedida de un prolongado
agarrón sobre el punta atlético, una situación repetitiva domingo tras domingo.

Como Messi y Cristiano en sus respectivos partidos, Falcao no tuvo su día. Durante
toda la noche, su lucha fue despiadada con Rami y Ricardo Costa. Tanto es así, que
el colombiano jugó con la venda en la cabeza, el central francés se marchó sustituido
con la espalda hecha polvo y Ricardo Costa fue expulsado. Una pelea sin cuartel que
acaba repercutiendo de cara al gol. Estuvo torpe para definir ante Diego Alves en un
gran pase de Adrián y no ejecutó esos vuelos majestuosos para cabecear con precisión.

El Atlético notó que su estrella estuviera con la pólvora mojada. Fue de más a menos
en el partido y acabó siendo anestesiado por el trabajo de la retaguardia valencianista.
Un trabajo que ofreció su mejor versión en lo que va de temporada. Pellegrino sabía lo
que se jugaba tanto él como su equipo y utilizó las armas adecuadas para desactivar
a su rival. Cada vez que recibían Adrián o Arda, siempre había dos
o tres jugadores a su alrededor guiados por el buen hacer de Gago.

La enésima expulsión de un míster

La tensión se mascaba en el ambiente como lo refleja la expulsión del técnico del Valencia
justo antes del descanso. Un hecho que tiene que hacer reflexionar al colectivo arbitral
pues son ya ocho expulsiones en lo que va de liga, una más que en todo el curso pasado.
Hasta Simeone intervino para quejarse por la expulsión de su colega. Le honra.

El segundo tiempo fue mucho más tosco y al Atlético le costó hacer siquiera alguna ocasión
clara. Los cambios, tan beneficiosos en partidos anteriores, no ofrecieron el mismo resultado
y así se llegó a la sentencia de Nelson Haedo Valdez. El paraguayo aprovecha los
minutos como nadie y otra vez volvió a mojar. Amagó con maestría para
tumbar a Courtois y marcar a puerta vacía en el tiempo de descuento.

Fue el final de la histórica racha del Atlético de Madrid. Una derrota que no debe ser motivo
de preocupación porque el único objetivo de entrar en Champions League va viento en
popa. En diez jornadas, son ocho puntos sobre el Málaga y once sobre el Valencia. El tiempo
dirá si llega a los partidos decisivos del campeonato con opciones de pelear por algo más.

I. Ruiz Escobar | 04/11/2012
elmundo.es

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